Qué es la tarima
Incluso si no estás puesto en reformas de interiores, seguro que has escuchado eso de «tarima o parquet», «suelo laminado o tarima». Y es que existen muchas opiniones respecto a lo que es mejor una de otra. Sin embargo, cuando nos preguntamos qué es mejor, ¿sabemos qué son realmente estos materiales? En este artículo queremos hablarte de qué es la tarima exactamente, sus características y sus ventajas.
¡Sigue leyendo y aprende qué significa tarima!
Qué es la tarima flotante
La tarima es un soporte que se fabrica en forma de tablas y se coloca en suelos generalmente de hogares. Es el tipo de suelo más común que las personas eligen en sus casas cuando piensan en una reforma o cuando tienen unas baldosas simples y quieren redecorar su hogar.
Es un material resistente y de calidad, a pesar de los mitos que existen alrededor de este tipo de suelo, como son que es débil o poco resistente en comparación a la madera.
Pueden ser de distintos tamaños así como diseños según las normativas. Actualmente la medida más popular es la de 1200 x 800 mm, la cual permite que se manipule en montacargas y en otros tipos de almacenes.
Características de la tarima
Ya sabes qué es tarima, pero ¿cuáles son sus características?
Pues esto varía en función del tipo de tarima con el que contemos. Esto tipos serían:
Suelos laminados
Los suelos laminados son el tipo de tarima más preferido por los hogares. La razón es que es uno de los suelos más resistente que existen dentro de las tarimas. Esta se caracteriza por añadir otra capa adicional así como añadir entre medio de ellas una capa de desgaste o algún papel de diseño.
Son realmente una imitación de la madera, pero una imitación de gran calidad, ya que no requiere apenas mantenimiento. De hecho, aunque pueda sonar irónico, este suelo es poco resistente al agua, por lo que limpiarlo es no tan efectivo.
Es la opción económica para aquellos que quieran un suelo de madera pero no pueden permitírselo.
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Tarima multicapa
La tarima multicapa, como su nombre indica, está formada por diferentes tipos de capa, concretamente de varios tipos de madera. Generalmente las capas inferiores tienen maderas más económicas como el pino mientras que las superiores tienen madera como las de noble. Es muy similar al parquet, pero con las ventajas económicas de la tarima.
Este tipo de tarima sí requiere de un mantenimiento importante. Concretamente debes acuchillar, lijar y aplicar barniz cada cierto tiempo.
Tarima maciza
La tarima menos económica pero también de mejor calidad es la maciza. Está formada por varias capas de noble. Eso sí, el mantenimiento es el mismo que el de las multicapas, solo que en este caso hay que ser más precisos e ir con más cuidado, ya que estamos ante madera de calidad.
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Ventajas y desventajas
Ya conoces qué es tarima, sus características y sus tipos pero ¿sabes cuáles son sus ventajas y desventajas? En la siguiente tabla puedes ver las principales:
| Ventajas | Desventajas |
| Simula la madera natural | Sonido hueco al pisar |
| Tiras finas de laminado | Duro |
| Limpieza y mantenimiento sencillo (aunque depende del tipo) | Reemplazo de la lámina en el caso del suelo laminado, mantenimiento de barnizado en las demás |
| Fácil instalación | Débil ante cambios de temperatura |
| Sobre cualquier tipo de suelo |
Como puedes ver en la tabla, las ventajas de la tarima son claras. La tarima flotante se caracteriza principalmente por ser una simulación de la madera natural, aunque claro está, esto depende del tipo.
Asimismo, la tarima tiene tiras finas de laminado, que facilitan su instalación, ya que solo hay que hacer «clic» y se colocan. Además, se pueden colocar en cualquier tipo de suelo, no importa si son baldosas o cemento, la tarima encaja en cualquier lugar.
Su limpieza es bastante sencilla, ya que solo hay que pasar un poco la escoba o la mopa para limpiar el polvo. Sin embargo, en cuanto al mantenimiento sí que hay que prestar atención al tipo, ya que cuanta más madera tengamos más mantenimiento hay que darle.
Por otra parte, en cuanto a las desventajas, la tarima presenta algunas como son el sonido hueco al pisar, que delata completamente su nivel de calidad estándar frente a la madera real, así como su dureza. También el mantenimiento, que en el caso del suelo laminado no se puede barnizar y hay que sustituirlo por otras piezas. Esto no sucede con las de más madera, donde hay que barnizar, con el trabajo extra que eso conlleva.
Además, otra de las principales desventajas es lo débil que es la tarima a los cambios de temperatura. Esto sucede por tener las piezas entrelazadas entre sí, dando lugar a que se expanda o se contraiga, dañándola por completo.
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